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  • Foto del escritorQuartier Suisse Hotel

Un hotel en Beirut


Un hotel en Beirut... ¡Y no un hotel cualquiera! Éste es un hotel construido con la calidad suiza y con el corazón. Un hotel que no pertenece a una cadena impersonal sino a unos inversores suizo-libaneses que lo renovaron con todo su corazón. Así que se sentirá a gusto aquí, ¡porque lo que se hace con el corazón siempre tiene ese detalle adicional que emociona, que sorprende, que llama la atención!





Puede reservar desde ahora su próxima estancia, ya sea para el ocio, para los negocios o para descansar, ¡o para todo al mismo tiempo! Nuestro alojamiento está situado justo en el centro de Brummana, un pueblo muy agradable que los libaneses conocen bien. Aquí, todos vienen de Beirut en búsqueda de la vida ideal y para disfrutar de los famosos restaurantes que están a sólo unos pasos del hotel Quartier Suisse.



Sus habitaciones personalizadas le esperan, le dan la bienvenida y le harán sentirse bien y... osemos decirlo... amado. Déjese mimar y envolver por una atmósfera oriental única. Y por la calidad suiza de los detalles que aportan paz y serenidad.



Un hotel en Beirut

Un hotel a escala humana, cálido, envolvente, abierto a las montañas, pues está situado en el Monte Líbano, a unos quince minutos de Beirut. Por lo tanto, podrá disfrutar de una frescura agradable durante el verano y de una vista magnífica y despejada que le dará una sensación de ligereza y bienestar. Al mismo tiempo, podrá aprovechar la animación de Beirut, tan cerca y a la vez tan tranquila, cuando uno ve las cosas desde un poco de altura... como desde aquí. El Hotel Quartier Suisse en Beirut, recordémoslo, ¡es un lugar que no se puede uno perder!



Este hotel da una impresión de espacio, en una atmósfera oriental refinada. De hecho, no es sólo una impresión, ¡es una realidad! ¡Este hotel está siempre abierto al mundo, como se dice de una persona que es extrovertida! Es un hotel cálido y cuidadoso con sus viajeros, animado y muy acogedor.



Habitaciones personalizadas

Las habitaciones, todas en el mismo tono marcado por esta dulzura de la vida oriental tan particular y tan rica, tienen cada una su propio carácter. Que esté usted solo, en pareja o con su familia, encontrará una habitación a su gusto que le invitará a una estancia cómoda y agradable.



Éstas han sido decoradas combinando la calidad suiza con la sutileza libanesa. El diseñador de interiores suizo que diseñó la felicidad interior también puso en ello todo su corazón. De hecho, cuando llegó al Líbano, se dio cuenta de que éste era un país que le inspiraba y le llamaba. Esas cosas se sienten. El hotel vibra del impulso particular con el que el diseñador renovó, de manera artística y comprometida, cada espacio. Especialmente las habitaciones, desde luego, ¡puesto que le esperan para alojarle!



El lobby, su chimenea y la terraza

El amplio y luminoso lobby del hotel le da la bienvenida con su personal atento, cálido, discreto y listo para atenderle y ayudarle a instalarse. En invierno, cuando el tiempo se pone más fresco, ¡la hermosa chimenea es un solaz cuando se está de regreso a buen puerto! Su fuego chisporrotea con la alegría del que regresa a su hogar.




Este espacioso lobby permite, en verano, por supuesto – pero también en primavera y otoño – sentarse en la terraza adyacente y disfrutar de una copa mirando hacia lo lejos, ¡contemplando las espléndidas montañas al horizonte!



¿Cuántos negocios no se han concluido en este lobby tan acogedor, cuántas declaraciones de amor no se habrán susurrado en esta gran sala? Afortunadamente, las paredes son discretas y guardan celosamente sus secretos. Lo que sí es seguro es que este lugar es propicio para los grandes momentos.



Una terraza en el techo del hotel

Compuesto de cinco pisos, el hotel tiene una terraza en su techo. Ésta permite disfrutar de una vista panorámica de los alrededores y, también, del tiempo que pasa deliciosamente en esta inmensidad bien presente.



Aquí también podrá usted disfrutar de una bebida servida por un personal siempre muy atento. Saborear, conversar, cambiar el mundo… este bar a cielo abierto es ideal para el verano. Lejos del calor a veces asfixiante de Beirut y del asadero del corazón del verano, esta terraza es un verdadero refugio, un oasis de frescura.



Cinco pisos y un mundo en sí mismo

Equipado con todas las comodidades modernas, incluido el wifi en cada habitación, este hotel – lejos de las grandes cadenas y sus habitaciones impersonales – es lo que a veces llamamos un hotel boutique. Un hotel que toma la dirección opuesta a la de la modernidad, que a veces es demasiado fría, para volver a un universo más familiar, sin por ello caer en la familiaridad.



En los pisos inferiores se encuentra el estacionamiento, la gran sala del desayuno de las mil y una noches, con su terraza para cuando hace buen tiempo. Más arriba, encontrará el gran lobby con su bar y las habitaciones que, aunque todas amuebladas con el mismo gusto, son de tamaños y orientaciones diferentes. ¡Justamente, las hay para todos los gustos! Ya sea con camas gemelas o con la cama king-size de dos metros por dos, estará usted a gusto.



Una estancia familiar o profesional

El hotel acoge regularmente seminarios profesionales en su amplia y hermosa sala, situada en la planta baja, que se prolonga en una terraza. Además, esta sala, mágica, puede también acoger una boda y su banquete, lo cual es particularmente agradable en verano. Pues, recordémoslo, la terraza es una invitación a tomar aire fresco y conectar con los paisajes que la rodean con toda harmonía.



Ésta es la descripción del hotel, un lugar de paso especialmente apreciado por la clientela internacional, pero también local, que lo visita regularmente.



¿Le hemos dado ganas con nuestro hotel en Beirut? Qué bien, porque no se arrepentirá.

Si está interesado, no dude en ir directamente a la página de reservaciones, en hacer clic o en llamarnos. Siempre habrá alguien para responderle, una voz cálida que se acordará de usted a su llegada.


Eso es también la tradición del Líbano. Una tradición que nuestro hotel ha sabido conservar contra viento y marea, sencillamente porque es su misión en la vida.



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